comenzar el camino de la sumisión, de la obediencia, de la entrega y el auténtico servicio, significa estar dispuesto a quedarte sin nada, ni física, ni psíquica, ni emocionalmente. esta es la conclusión a la que ha llegado el objeto en este punto del camino. posiblemente si hubiera sido tan consciente de eso al principio del mismo no habría comenzado el viaje, no porque no lo deseara o necesitara, sino porque no estaba preparado para asumir esta verdad. está ahí, en el fondo siempre la intuimos pero no de manera clara. y además esta es la razón por la que muchos ni siquiera comienzan el camino y se quedan en una práctica meramente sexual y esporádica que, al final no los satisface y los deja vacíos. los esclavos naturales, aquellos que sentimos que hemos nacido para servir y obedecer, tenemos la necesidad de llegar a este punto, a estar dispuesto a perderlo todo. luego vienen las otras circunstancias: un Dominante que nos lleve por el buen camino y que sea lo suficientemente habilidoso e inteligente como para conseguirlo, que se produzca el encuentro, que las condiciones lo propicien, etc. son un montón de elementos que deben conjugarse. pero al principio, y al final, debe estar esa necesidad de quedarse sin nada, tal como viniste al mundo, vacío, para que el Amo pueda llenarte con sus órdenes.
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