en la estética contemporánea el cuero ocupa un lugar especial. es cierto que ya no es símbolo de rebeldía y oposición social. casi podríamos decir que es al contrario. llevar una auténtica chaqueta de cuero es un signo de distinción y riqueza. aún así mantiene el carácter fetichista que le da el cuero. actualmente los varones se preocupan por su imagen, a veces de forma excesiva. el pelo repeinado, la barba perfilada. han ido proliferando peluquerías exclusivamente para varones que se mantiene con los jóvenes que acuden a ellas semanalmente. siempre que hay una preocupación excesiva por la estética, la ética sale perjudicada. quien se preocupa demasiado por su imagen no le dedica el suficiente tiempo a su mundo interior, el objeto siente que debe llevar un equilibrio entre ambos aspectos. o tal vez no. desde que el Dueño ha ordenado que llevará capucha la mayoría del tiempo, ¿para qué dedicar tiempo a la estética? lo único que tiene que hacer el objeto es preocuparse por mantener el cuerpo del Dueño en buen estado para ser usado como El desee.
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