día 3875 de esclavitud, castrado permanentemente

dentro de una semana el objeto tiene que volver al trabajo y eso coincide con un repunte en la epidemia del covid en gran canaria. se están superando los 200 nuevos casos sólo en esta isla, pero con creces: 260, 270, etc. dentro de una semana el objeto tendrá que volver a liderar a un grupo de 50 personas en estas condiciones, y ser responsable de ellos. y sinceramente es algo que le quita el sueño, literalmente. lo que más rabia le da es que sus superiores no han hecho su trabajo y ahora le toca hacerlo al objeto, o plantarse, utilizando una forma de control informal que ha existido siempre, una especie de huelga a la japonesa: preguntar todo para que la responsabilidad suba para arriba. el que obedece no se equivoca, dice una máxima del bdsm tomada de la religión, pues adelante, que sean los que cobran por decidir los que decidan y el objeto sólo obedecerá. lo que no puede hacerse es delegar la decisión para que si sale mal, seas el chivo expiatorio. eso es de un mal jefe, igual que lo sería de un mal Amo. quien tiene el poder tienen acompañada la responsabilidad y esto es lo que ha fallado en este caso y lo que sigue fallando. al final esto hará lo que el Dueño ordene y asumirá las consecuencias pero lo más irónico es que, si lo destituyen, el objeto se sentiría profundamente liberado.
tal vez por esta tensión hoy le ha dado al objeto una contractura muscular en la espalda. fue inesperadamente, por sorpresa y sin que tuviera razón evidente alguna. sencillamente ocurrió. el cuerpo es muy sabio y somatiza todo lo que le ocurre. el objeto ha aprendido a leer su cuerpo y a interpretarlo y le está diciendo que lo que viene no está bien.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.