podemos plantearlo como queramos pero todos, absolutamente todos, sin distinción, buscamos un lugar en la vida y un sentido a nuestra existencia. esta es la base y, a partir de ahí, cada cual empieza a rellenar las casillas. para unos es ganar dinero, para otros vivir disfrutando al máximo de los placeres hedonistas de la vida. para algunos es tener un buen coche y para otros viajar mucho. para los sumisos, esclavos e inferiores, el sentido de nuestra existencia es servir a nuestros Dominantes, Amos, Superiores. las formas de hacerlo varían mucho, casi siempre la forma que establezca el Dominante. para algunos es algo exclusivamente sexual, para otros es algo más profundo, casi espiritual. para algunos tiene que ver con el cuero o el latex, para otros con botas o zapas. lo que sí parece al objeto cada vez más claro, es que su existencia depende de dos verbos que resuenan una y otra vez: servir y obedecer. sin estas dos cosas el objeto no podría seguir existiendo y son las dos patas con las que se presenta ante el Dueño, aunque normalmente esté de rodillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario