los días se suceden y se parecen. hoy el objeto fue a trabajar y tuvo que atender muchas cosas y muchos problemas. sin embargo su mente, la del objeto, sigue encerrada.. las conversaciones con el Dueño son iguales: no hay resistencia. Él ordena y el objeto obedece, sin rechistar, sin objetar nada. cada vez la sumisión es más profunda, más radical y no sólo por parte del objeto sino también por parte del Dueño. hay una relación entre ambos, una especie de influencia mutua, a mayor sumisión mayor dominación por parte del Dueño y viceversa.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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