no todos los días son iguales, aunque lo parezcan, y más por el confinamiento obligatorio, que en el caso del objeto es bastante voluntario. por fin las condiciones se han unido para que pueda tener una experiencia de lo que sería su vida encerrado por el Dueño y, por ahora, quitando la cuestión de la enfermedad, está siendo un éxito.
como decía no todos los días son iguales y hoy esto se ha levantado avergonzado de estar enjaulado, de no tener sexo. la palabra correcta tal vez no sería avergonzado, porque eso sería un sentimiento muy humano. o tal vez si y no sean más que los restos del ego que intenta manifestarse. el hecho es que, nada más despertarse y sentir la jaula, el objeto se ha dado cuenta de que no es un hombre como los demás. un hombre no estaría enjaulado ni llevaría tanto tiempo sin un orgasmo. es contranatura, y precisamente por eso la conclusión lógica es que esto no es un hombre nunca más. su propia naturaleza se lo dice, es algo inferior a un hombre y por tanto vive y existe para servirles. por eso pertenece al Dueño. el obvio, es sencillo, es lógico, es lo natural.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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