esto no puede evitar, de vez en cuando, mirar retrospectivamente, releer un pasado desde su presente para mirar al futuro. y en ese pasado el punto culminante es cuando el Dueño lo capturó y lo hizo de su propiedad. a veces le gusta hablar de ese momento, especialmente de como el ego y la prepotencia del objeto le hicieron creer que lo tenía todo controlado. la experiencia y los acontecimientos posteriores demostraron no sólo que no era así sino que justo en ese momento habrá perdido el control de la situación.
el Dueño, sin embargo, lo tuvo claro desde el principio, desde esa noche.
entonces el objeto no sabía como ahora que el Dueño es muy controlador, una cualidad indispensable para un Amo y Dominante, y que nunca da un paso sin tenerlo todo calculado. de hecho poco más tarde aprendió que hace un planning de cada una de las visitas del objeto en un cuaderno. no deja nada a la improvisación.
a partir de ese momento, y por cerca de diez años ya, el Dueño ha ido encerrando al objeto en una jaula de la que ya no puede escapar.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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