el objeto tenía hoy la comida de navidad del trabajo y el Dueño dio permiso al objeto para ir. a primera hora el Dueño ordenó al objeto que fuera con las botas nuevas para estrenarlas. el objeto aceptó la orden pero al rato suplicó permiso para confesar. una vez dado, el objeto contó que había soñado estrenarlas con el Dueño en un viaje a madrid. eso agradó mucho al Dueño que cambió la orden y ordenó que llevara las botas de madrid, que se han convertido en las botas "especiales".
la comida estuvo muy bien porque se convirtió en un espacio donde se valoró mucho al objeto y su trabajo. fue inesperado pero gratificante.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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