el objeto lleva cuatro días con las botas de madrid, las que el Dueño compró al objeto. ha caminado mucho estos días y han acabado haciéndole daño en el talón. hoy apenas podía caminar pero tuvo que hacerlo.
por la mañana fue al congreso y luego a madrid donde comió y recogió el equipaje para salir hacia el aeropuerto. había muchísima gente por la calle y al objeto le dolían mucho los pies. lo que más le costó fue en el aeropuerto cuando tuvo que quitárselas para pasar el control de seguridad. volver a ponérselas fue un tormento. le dolía la verdad. lo más llamativo fue que el Dueño, sin decirle nada de esto, le mensajeó ordenándole que se pusiera las zapas hasta que los pies estuvieran bien.
el viaje fue relativamente tranquilo a pesar de que tuvimos que correr dos veces en el aeropuerto debido al cambio de puerta.
cuando el objeto llegó a casa estaba agotado y mañana tiene que volver al trabajo.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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