esta imagen es posiblemente la quintaesencia de lo que el objeto piensa, siente y vive sobre el bdsm. cuando dicen que una imagen vale más que mil palabras el objeto no puede sino afirmar que es cierto en este caso. no es el cuero, ni las botas, es la actitud de ambos lo que cautiva al objeto y lo que llama su atención. ambos muestran la naturaleza asimétrica de su relación, cómo uno está al mando y otro obedece, uno decide y el otro se somete, uno guía y el otro sigue. y en esta relación ambos son felices y encuentran su realización plena. el Amo lo hace llevando al esclavo hasta su plenitud, el esclavo cumple los deseos más profundos del Amo. es una relación plena, simbiótica y completa.
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