miércoles, 20 de marzo de 2019

día 3352 de esclavitud, 1324 de castidad

hoy el objeto se ha parado a pensar y ha caído en la cuenta de lo mucho que el Duero ha cambiado al objeto, y no se refiere al control mental sino sobre todo al aspecto físico. el objeto ya es un botero. lo saben en el trabajo, sus familiares, sus amigos. después del choque inicial ahora les resultaría extraño verlo sin botas. da igual el entorno o un texto social en el que esté, las botas están siempre presentes. y eso es lo que se ve, porque también en el aspecto físico, pero en lo que no se ve está la jaula de castidad, con la que el objeto se ha familiarizado tanto que no se ve capaz ya de vivir sin ella. no sabe el objeto lo que deparará el futuro, pero hoy cree el objeto que si el Dueño le diera la libertad, lo más trágico que imagina el objeto que pueda pasarle, aún así seguiría con la jaula, porque ya no se encuentra mi ella.
estas son dos cosas que son las más evidentes y posibles, porque el objeto sabe que al Dueño le gustaría ver al objeto siempre de cuero, como una especie de uniforme, y con la cadena o el collar al cuello. al Dueño le gustaría que todo el mundo supiera que el objeto es un objeto y que es de su propiedad. a veces el objeto piensa que incluso le gustaría llevarlo por la calle amordazado y atado, tirando del objeto con una cadena atada al cuello, como se lleva de paseo a un animal.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.

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