antes de acostarse el objeto debe agradecer al Dueño que le haya permitido vivir un día más y antes, o después de que lo haga, el Dueño le ha mandado un mensaje diciendo que botas debe llevar al día siguiente. en esta acción se unen dos hechos que producen un fuerte efecto en el objeto: por un lado que el Dueño escoja la ropa, en parte al menos, que va a llevar el objeto al día siguiente, y por otro que el objeto ya es un botero reconocido así por todos los de su entorno. hace años, antes de ser una propiedad del Dueño, el objeto jamás se hubiera imaginado que llegaría un momento en el que solo utilizaría botas y así lo vería todo el mundo. ahora no se siente bien llevando otra cosa. con ellas el objeto pisa fuerte y pisa de una manera diferente a todas las demás. el ruido de los tacones le precede y es una forma de marcar esto, incluso de diferenciarse, pero no como algo para sobresalir sino al contrario, para dejar claro de alguna forma que el objetivo es humano ¿como? porque las lleva por obediencia. si el Dueño ordenara que fuera a trabajar con chanclas, lo haría, o si fuera con zapatos elegantes, lo haría. porque no es ya decisión del objeto, sino del Dueño.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega
jueves, 31 de enero de 2019
día 3304 de esclavitud, 1276 de castidad
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