el objeto salió con unos conocidos con permiso del Dueño, una de esas comidas a las que acude el objeto de vez en cuando. lo más llamativo de todo fue que a pesar de estar rodeado de humanos y comportarse aparentemente como un humano, no se sintió en ningún motivo como un humano. la idea de tener la mente enjaulada y encadenada, además de amordazada, ha tenido su efecto y sigue profundizando en la mente del objeto. el objeto mantuvo informado al Dueño en todo momento donde estaba y lo que hacía.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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