el objeto durmió bien a pesar del calor, entre 35 y 40 grados. al levantarse, siguió las instrucciones del Dueño. fue a la cocina y se preparó el desayuno. luego se fue a la ducha y se puso las botas sendras y una mordaza con cinta americana con la que estuvo toda la mañana, encerrado además. el Dueño pasaba de vez en cuando a comprobar cómo estaba el objeto que sólo asentía con la cabeza cuando le preguntaba si estaba bien.
durante toda la mañana el objeto estuvo leyendo y escribiendo, algo que le costó un poco porque tenía aún los grilletes puestos, desde ayer y le parece que no se los quitará en lo que queda de viaje hasta que vaya al aeropuerto.
a cualquiera le podría parecer un desperdicio venir aquí para estar leyendo y escribiendo pero no se trata sólo de eso. se trata de estar leyendo y escribiendo encerrado, enjaulado, con grilletes y dependiendo de los deseos del Dueño. Él marca el ritmo, lo que puede o no hacer el objeto, lo que le está permitido y lo que no. El controla todo, y para eso es para lo que el objeto ha venido.
fuera hace un calor terrible y el objeto no está acalorado porque donde está hay aire acondicionado que evita que la temperatura sea demasiada, así que pasó la mañana completo y absolutamente silencios y trabajando en varias cosas.
cuando se hizo el mediodía, el Dueño apareció en la habitación del objeto y le ordenó que ser pusiera el pantalón y el chaleco de plástico que había adquirido la última vez que fue a la tienda fetish. además ordenó que se pusiera las sendras por fuera. asi lo hizo y cuando terminó el Dueño sacó al objeto y lo sentó en una silla en otra habitación, le ató las piernas con cuerdas y los grilletes a la espalda. luego amordazó al objeto como ayer, con dos tiras de tela, una dentro de la boca y otra por fuera tapándola.
el objeto ya estaba indefenso y entonces el Dueño empezó a "jugar" con él.
-Ya no puedes hacer nada - dijo - Estás indefenso y te voy a vender pero antes tengo que probar la mercancía.
el Dueño quería meter al objeto en una situación concreta y el objeto no dudó, sino que entró directamente porque estos días está viviendo algo que ya sentía pero que ahora es real: está aquí para todo lo que quiera el Dueño, para todo lo que desee. en cierta medida ser un objeto también es convertirte en un "juguete". no ser nada, no tener derecho a nada, significa estar completa y absolutamente a disposición del Dueño y a ser lo que El quiera que sea. si un perro, el objeto ladrará; si un criado, el objeto limpiará la casa; si una cosa, el objeto no se moverá.
el hecho es que el Dueño quería que el objeto fuera un prisionero y así se comportó. el Dueño amenazó con pegarle si no se comportaba y que dejara de resistirse y aceptará su situación.
a continuación lo levantó, tras desatarle los pies, y lo llevó, con las manos atadas a la espalda por todo el pasillo hasta su dormitorio donde lo tiró sobre la cama. el chaleco quedó un poco abierto, lo que aprovechó el Dueño para colocar unas pinzas y le daba una patada en los genitales.
-No te resistas. No hay nada que puedas hacer- decía el Dueño.
el objeto estaba completamente metido en el role. tampoco hacía falta mucho porque esa situación es una de sus fantasías. el dolor de las pinzas era fuerte, pero soportable.
la siguiente "escena" fue cuando el Dueño levantó al objeto y lo metió en el pequeño cuarto que tiene en su dormitorio y le puso una capucha.
-Ahora te quedarás aquí hasta que vengan a buscarte y te lleven con tu nuevo Amo. te aconsejo que te sometas porque no se andan con chiquitas y si les causas problemas te matarán y punto.
lo curioso de todo esto fue que allí, atado con grilletes, amordazado y con una capucha de cuero, el objeto se sintió como quería el Dueño, como un prisionero que debía abandonar toda esperanza de vivir otra vida que aquella, una vida de esclavitud, sumisión, servicio, de ser usado para dar placer... no había nada más. el objeto ya no sabía si estaba haciendo un papel para el Dueño o era su vida real ¿había alguna diferencia?
sobra decir que el Dueño se corrió allí mismo, sobre el objeto, a quien desató y llevó hasta la celda que está ocupando en este viaje. allí le ordenó desnudarse y darse una ducha. a continuación comimos y el Dueño se fue a echar una siesta mientras el objeto se quedaba encerrado leyendo y escribiendo.
las horas pasaban casi sin darse cuenta y el objeto estaba en paz y tranquilidad. a media tarde le dolían ya los ojos y el Dueño había dicho que podría aislarse cuando quisiera usando unos cascos y un antifaz que privaba de visión y que el objeto ya ha utilizado anteriormente. el objeto se lo puso y quedó completamente aislado del mundo. no oía nada ni veía nada.
no pasó mucho tiempo, bueno, el objeto no lo sabe realmente, hasta que sintió al Dueño delante suya que, rápidamente unió los grilletes por delante. muy duramente lo levantó y lo llevó de nuevo por el pasillo con las manos por delante, tirando de los grilletes. le quitó los cascos y volvió a tirarlo en la cama. estuvo alternando que lo masturbara con que se la chupara un rato. luego llevó la boca del objeto a los huevos y esto se lo metió en la boca. todo era muy rápido y duro. estaba usando al objeto, no compartiendo con él ni mucho menos.
cuando el Dueño se corrió con grandes gemidos y espasmos, el objeto estaba de rodillas sobre la cama, con las manos apoyadas sobre ella y la cabeza gacha. y así se quedó, así hasta que el Dueño volvió a cogerlo por los grilletes y lo llevó de vuelta a su "celda". al entrar le señaló el sofá que hay allí y le dijo:
-¡Túmbate!
el objeto obedeció, aún con los grilletes unidos por delante. y a continuación el Dueño le dijo al oído:
-No eres nada. No tienes derecho a nada. Quiero que te vayas muy abajo.
sorprendentemente el efecto no fue el mismo que ayer, el de ser empujado por un acantilado y empieza a caer. tal vez fuera porque el objeto venía excitado de haber sido usado de esa forma por el Dueño, de hecho había sentido dolor con un intento de empalmado del apéndice.
el hecho es que el objeto notó como su cuerpo se "desconectaba" pero su mente seguía muy activa. es una sensación difícil de explicar. el cuerpo se fue relajando cada vez más hasta que no pudo mover ni un músculo. no le respondía, pero su mente no se relajaba a la misma velocidad.
el objeto tuvo una sensación parecida, si no igual, a las veces que ha sido momificado por el Dueño, pero sin estarlo. el tiempo pasaba, en este estado se pierde la noción del tiempo y el cuerpo comenzaba a doler. es ese dolor de estar mucho tiempo en la misma posición y necesitas cambiar y entonces te mueves, en una silla o en la cama, y el dolor desaparece. sin embargo, el objeto no podía moverse ni cambiar de posición.
entonces una idea apareció en la mente del objeto: el Dueño no necesita cuerdas, ni rejas, basta con poner al objeto en esta situación para que no pueda salir porque ha perdido el control sobre él mismo.es una idea que ya conocía pero que ahora, además, estaba experimentando. ayer y hoy el Dueño había lanzado al objeto a la mazmorra más profunda que haya conocido, su propia mente enjaulada por su autoridad.
el objeto sintió vértigo ¿temor? no sabría decirlo. ahora reflexionando sobre esto se da cuenta de que ha sido lo que siempre suplicó al Dueño, pero es que además sabe que es lo que necesita, lo que busca, lo que desea, lo que añora y lo que agradece al Dueño.
en resumidas cuentas fue una sesión de tortura, porque al objeto le dolía todo, pero no podía pedir ayuda, porque no controlaba su boca, y tampoco podía liberase, porque aunque tenía los grilletes unidos por delante y estaba tumbado boca arriba, no podía moverse. dependía completamente del Dueño.
la diferencia con la experiencia de ayer es que la mente del objeto también estaba en un estado alterado, de relajación profunda. hoy no, de hecho, cuando el Dueño volvió se encontró al objeto con los ojos abiertos, mirándolo y siendo consciente de todo, pero sin poder mover nada, ni siquiera abría la boca.
"esto no puede ser verdad. vamos, muévete", se decía a sí mismo pero no podía hacerlo.
el Dueño sacó al objeto de ese estado con gran esfuerzo, como si estuviera abriendo varias puertas y candados. el objeto estaba encerrado, y como la primer vez que lo ataron, que sintió excitación, temor, vértigo y la certeza de que era aquello a partes iguales; el objeto ha sentido hoy que ha traspasado una barrera importante.
después de ducharse Dueño y objeto se pusieron a hablar de lo que había ocurrido. eso es terapeútico porque obliga al objeto a dar forma y a poner palabras a lo que le ha sucedido, pero es algo muy difícil. el objeto pensó en la posibilidad de llegar a ese punto de "desconexión" entre mente y cuerpo sin tener que estar tan relajado, por ejemplo en un paseo con el Dueño o en cualquier momento, que el Dueño quiera que el objeto se convierta en un autómata sin voluntad y sin volición pero con conciencia.
hablamos de las posibilidades, del futuro. el Dueño dice que tiene sus planes, que tiene cosas pensadas, que no comparte con el objeto, pero que están ahí y que El conseguirá.
-¿Crees que puedes llegar a más?- preguntó
y el objeto le dijo que no era capaz de imaginar cómo o hasta donde y le puso el ejemplo de la castidad. hace unos años el objeto tenía que suplicar permiso para correrse, y pensaba que no era posible. ahora está castrado y el Dueño le ha dicho que nunca más volverá a tener un orgasmo normal. con esta experiencia. ¿hasta donde puede llegar el Dueño con esto? el objeto no se atreve a decir nada más.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
jueves, 2 de agosto de 2018
día 3122 de esclavitud, 1094 de castidad
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