un día duro e intenso, intenso por las cosas que el objeto ha tenido que hacer y duro por tener que enfrentarse el objeto a egos monumentales. no paran de aparecer y cada vez más fuertes. el problema es que esto no sabe si ve más egos porque cada vez los identifica mejor, o porque efectivamente cada vez hay más.
antes esto el Dueño tiene la misma y única respuesta: "Eso no es tu mundo, no deberías estar ahí. Estás porque Yo lo quiero.tu sitio es amordazado, atado y encadenado bajos mis botas". como siempre el Dueño tiene razón.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega
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