un día tranquilo. el objeto estuvo toda la mañana trabajando y como había ordenado el Dueño, lo hizo con el collar y además amordazado con la mordaza en forma de pene que compró en fetish la última vez que estuvo en madrid. necesitaba esta humillación, sentirse un comepollas, aunque sólo fuera de plástico.
aproximadamente a la hora las mandíbulas del objeto le dolían y había limpiado varias veces la saliva que chorreaba por la boca del objeto. cada vez necesita más esto, es como su terapia, su momento de paz y de relax entre tanto ego, entre tanta barabunta, entre tando egoísmo que sólo piensa en sí mismo. cuando el periodo de entrenamiento terminó, el objeto estaba con la boca dolorida y reseca, pero contento y en paz, feliz. cada vez nota como va mas abajo, o mejor dicho como necesita ir cada vez más abajo, más humillado y sometido. el último viaje, del que no hace ni un mes, ha sido la confirmación de que el objeto es un objeto y que el Dueño es el propietario de ese objeto.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
domingo, 19 de noviembre de 2017
día 2866 de esclavitud, 838 de castidad
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2 comentarios:
Aveces el ego nos hace olvidarel abandono que debe existir...estos ejercicios permiten doblegar ese ego y recordar cuál es el punto que nos correspond...silencio y sumisión
por eso hay que estar siempre atentos y pendientes. gracias por el comentario
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