día 2742 de esclavitud, 714 de castidad

a veces una pregunta tonta trae consigo una respuesta radical y profunda, que desarticula al que la hace. hoy el objeto preguntó, con todo respeto y humildad, sin ninguna intención oculta, si el Dueño había abandonado la práctica de insertar un buttplug en el culo del objeto, ya que hacía tiempo que no lo ordenaba. el Dueño contestó que no, pero que no había tenido tiempo para supervisarlo. era una práctica muy humillante, dijo, y no iba a renunciar a ella con el objeto.
para cualquiera podría ser una conversación intrascendente, pero esas palabras perforaron la mente y el alma del objeto, precisamente por el poder y el control que tiene el Dueño. ante El el objeto se siente nada, ridículo, apenas como un niño, indefenso y dependiente. sus palabras son sagradas y el objeto las recibe con veneración. decir que usar un buttplug es humillante y que por eso no renuncia a hacerlo es como afirmar que alimentará al objeto, que lo cuidará y que el Dueño no se olvida de su bienestar. porque la humillación es lo que necesita todo inferior para seguir sintiéndose inferior en ese mundo de egos. por eso es su alimento, y todo alimento bien dado ayuda a crecer. eso es lo que el Dueño desea y es lo que el objeto hará. no puede hacer otra cosa porque ocurrirá incluso aunque no quiera, o no lo desee. justo acaba de escribirlo y el objeto se da cuenta de la contradicción. un objeto no puede no-querer, o no-desear. sencillamente obedece y punto.
el objeto tenía hoy una comida a la que pudo ir porque el Dueño dio su permiso. no sólo tuvo que suplicar ir , sino que como era una comida suplicó permiso para tomar algo de vino. esto es la concreción material del hecho de que el cuerpo del objeto ya no pertenece al objeto sino al Dueño. tomar algo como vino necesita del permiso del Dueño. cualquier cosa que perjudique al objeto debe ser rechazado por el objeto.
esto tienen una versión positiva porque el objeto debe cuidarse tanto en hábitos alimenticios como de salud, mantener su cuerpo en el mejor estado posible para ser usado por el Dueño.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.