día 2694 de esclavitud, 666 de castidad

el objeto acaba de visitar un blog que tiene como título "disciplina y control" (puedes visitarlo picando aquí). esta expresión condensa de la forma más sintética de qué va esto del bdsm. en el fondo todo se reduce a eso, a disciplina y a control. ambos términos pueden aplicarse tanto al Dominante como al sumiso ya que en uno actúa de una manera activa y en otro pasiva. sin embargo al objeto le gustaría centrarse en la disciplina. hay una acepción que consiste en infligir un castigo a alguien, normalmente mediante golpes en el culo. viene un poco del imaginario de los colegios ingleses del siglo XIX donde los castigos corporales como medio educativo estaban a la orden del día.
sin embargo el objeto lo entiende más con otro significado: observancia de las leyes y ordenamientos de la profesión o instituto, es decir, cumplir las normas y leyes de lo que te es propio. un inferior, cualquier inferior, es disciplinado si obedece y cumple aquello que tiene que obedecer y cumplir por ser inferior, especialmente aquellas normas establecidas por el Amo o Dominante al que pertenece.
para los inferiores, especialmente para el objeto, esto no es un esfuerzo o una obligación, es una necesidad. el objeto se da cuenta de que necesita estar normas, estas leyes, que organicen su vida, que le den sentido y contenido. sin ellas el objeto está perdido, sin rumbo. es por esto que siempre afirma que su naturaleza es la de un inferior que nació para obedecer, porque no ha sido hasta que el Dueño lo encontró y decidió que sería de su propiedad, que la vida del objeto ha empezado a tener realmente sentido. antes de eso estaba sin rumbo, viviendo una especie de angustia existencial permanente, como si no encajara ni cuadrara en ningún sitio.
ahora esto no es así, la paz y la tranquilidad existencial se han establecido y asentado en la vida del objeto, y la principal razón es por el control y la disciplina que el Dueño ejerce. en un momento dado, después de haberle mandado unas cuantras entradas, el Dueño mandó un mensaje claro y conciso. decía que se había dado cuenta de lo que había sufrido el objeto antes de que El lo encontrara, y así es. definitivamente así es. cualquiera desde unos esquemas externos podría pensar que la vida que lleva ahora el objeto es una vida de sufrimiento, sometido hasta el punto que está a la voluntad del Dueño, pero nadie sabe cómo era antes. vivir perdido no es vivir, y saberte que estás buscando algo pero no sabes qué es tampoco es vivir. ahora es diferente. cada día tiene un sentido, un orden, un contenido. ha sido el Dueño quien ha hecho posible y quien lo hace cada día. sabiendo esto ¿alguien puede negar que el Dueño ha salvado al objeto?
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.