día 2345 de esclavitud, 317 de castidad

ser un objeto facilita mucho la vida, relativamente es fácil. todo el dolor, la culpa, la frustración y la pena vienen normalmente por la diferencia entre lo que "debería ser" y "lo que es". siendo un objeto lo que "debería ser", desaparece. todo es "lo que es", porque no eres nada y no aspiras a nada más de que lo que el Amo, en este caso el Dueño, decida. es la paz más completa, porque no se aspira a otra cosa que a lo que eres. la responsabilidad desaparece, se esfuma, sólo tienes que obedecer, y quien se obedece no se equivoca. eso ya corresponde al Amo, al que ordena. ser un objeto es fácil. no tienes que elegir qué ponerte, qué comer, qué hacer en las próximas horas o días. todo depende de otro y lo único que tienes que hacer es obedecer lo que te ordenan, hacer lo que te mandan, someterse.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.