miércoles, 16 de marzo de 2016

día 2253 de esclavitud, 225 de castidad

la no-vida sigue intentando que 402 se despiste y se aleje de su objetivo, sin conseguirlo por cierto. cuando sale del trabajo, 402 pude dedicarse a su vida y con la hora de recogimiento que el Dueño ha establecido como obligatoria diaria, esa cuestión la lleva más a rajatabla. al menos una hora entera dedicada al bdsm. la verdad es que suele ser más, porque entre una cosa y otra, este objeto siempre está pensando en bdsm pero es cierto que esa hora es más intensa. y debería decir especialmente intenta cuando tiene que dedicarla al entrenamiento del ano con el butt plug, y hoy era uno de esos días. a media tarde este objeto cogió el butt plug más pequeño y se lo metió por el ano con un poco de esfuerzo, pero menos de lo que esperaba que le costase. mientras lo dilata para entrar lo primero que se impone es el dolor, con cierto alivio cuando finalmente se ajusta en su lugar. al ser más estrecho en la base llega un momento en que es ano se cierra alrededor de este estrechamiento. sin embargo este butt plug en concreto no es muy ancho, pero sí muy largo, por lo que se ajusta relativamente pero empuja y roza mucho la próstata.
a los 5 minutos la sensación empieza a convertirse en molestia y hasta diría que dolor. la presión que ejerce el butt plug sobre la próstata es mucha y deja de ser agradable. el cuerpo intenta expulsar del cuerpo ese objeto extraño.
a los 10 minutos 402 necesita hacer mucho esfuerzo para que el butt plug no salga. a pesar de quedar ajustado por la parte inferior, hay que dilatar para meterlo y el esfinter intenta cerrarse sin conseguirlo por lo que tiende a expulsarlo. este objeto presiona para dentro pero sólo consigue que se entierre aún más en su interior, presionando aún más. el sudor comienza a aparecer.
entre los 15 y 20 minutos el entrenamiento se convierte en una tortura. el butt plug escuece dentro y sigue luchando por salir, mientras 402 hace esfuerzos por mantenerlo dentro. ya el sudor es generalizado y el dolor también. al llegar a los veinte minutos, faltando 10 para la media hora, 402 tiene que ir corriendo al baño. no se ha lavado por dentro antes de hacer el entrenamiento y tiene la sensación de que no podrá soportarlo mucho tiempo más sin hacérselo encima. al final se lo saca y efectivamente tiene que sentarse inmediatamente en el retrete mientras oleadas de dolor le recorren el cuerpo. se siente sudoroso, dolorido y profundamente humillado. ese era el objetivo, y está cumplido definitivamente.
con esa sensación 402 vuelve a sus tareas sintiendo en su cuerpo las oleadas de dolor que le produce el ano, ahora más abierto que antes de empezar el entrenamiento, y sabiendo que esto es sólo el principio y que queda por delante muchos días como el de hoy, e incluso peores.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.

No hay comentarios: