día 2152 de esclavitud, 124 de castidad

en este último trimestre, el tiempo que ha pasado desde la última vez que el perro sirvió al Dueño, el perro ha notado cómo, a pesar de creer que había avanzado mucho, su entrenamiento ha ido a pasos agigantados. el mismo Dueño lo ha corroborado con frases esporádicas como "te estás curando" o "estás abrazando tu auténtica naturaleza". nada hay más terrible que estar perdido interiormente, que vivir sin un sentido y sin dirección. ahora el perro tiene esa dirección, ese sentido.
además está aristóteles que decía que la felicidad era comportarse acorde con la propia naturaleza. cuanto más abrace el perro su naturaleza, más feliz será, más de lo que es ahora.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega