el perro sabe que, para cualquiera de fuera del mundo bdsm, un esclavo debe resultar patético. y así debe ser, porque si no fuera así, el efecto que tendría la humillación sobre el ego sería mínima, y por tanto el entrenamiento sería efectivo. un esclavo debe parecer patético hasta el punto de que lo asuma, lo crea y lo viva. entonces el orgullo, la prepotencia y la autosatisfacción desaparecerán. alguien orgulloso y prepotente tiene un ego muy grande, tanto que éste impide verlo tal como es. vive para el exterior, para la imagen, para los demás, pero no porque desee servir o hacer algo bueno para ellos, sino porque no soporta desvelarse tal y como es. un esclavo es entrenado para vivir sin tener en cuenta el ego, y por tanto debe mostrarse tal y como es. curiosamente objetos como las capuchas que, aparentemente, cubren el rostro del esclavo, lo que hacen es desvelar su verdadera naturaleza. si un esclavo no parece patético a los de fuera no va por buen camino. otra cosa es lo que Amos y esclavos piensen y opinen de él, que es algo completamente diferente.
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