día 2080 de esclavitud, 52 de castidad

todas las mañanas el perro envía el mensaje de saludo al Dueño donde expresa su sumisión y devoción. hoy no fue distinto de otros días pero el Dueño no contestó al perro como normalmente, deseándole buen día, sino que le envió un escueto "tienes un email".
cuando lo abrió el perro dentro tenía un mensaje donde le decía que quería una ofrenda, un cd. el perro iba de camino al trabajo y allí mismo, con el móvil, lo compró y envió el email de confirmación al Dueño. entonces llegó el mensaje "ahora puedes tener un buen día, perro". todo fue muy rápido, apenas cinco minutos, menos incluso.
cuando por fin leyó el mensaje el perro se sintió feliz. el Dueño había ordenado y el perro había obedecido, sin dudar, sin rechistar, sin protesta, ni cuestionas. sólo obedecía inmediatamente. el resto del día tuvo sentido gracias a ese momento.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.