viernes, 21 de agosto de 2015

día 2045 de esclavitud, 18 de castidad.

el Dueño y el perro mantuvieron una de esas conversaciones en las que se dicen muchas cosas que suben la temperatura. hoy, además la cosa fue a más profundidad porque volvió a salir el último encuentro en que el Dueño avanzó bastante en el entrenamiento del perro. el Dueño ha dicho que este invierno el perro irá más a servir al Dueño y que el entrenamiento se intensificará. en concreto dijo que el saco de cuero para dormir será lo próximo.
pero en este viaje también se ha profundizado en aspectos psicológicos intensos y que trascienden lo puramente físico. ante el Dueño el perro se siente débil e impotente y ya no sólo en el contexto de un encuentro de tipo sexual, sin del otro también; de cualquiera de hecho.
también hablamos de la relación Amo-esclavo y si el Amo debe ser implacable con el esclavo en determinados momentos especialmente si éste ha cometido un fallo y merece un castigo.
la idea que rondaba al perro era que un esclavo debe ser mantenido siempre con la correa muy corta porque existe la constante tentación de zafarse, de salirse de los márgenes establecidos por el Amo. control, control y más control parece la solución en estos casos. cuanto más corta la correa, mejor se sentirá el perro.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.

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