cualquiera ajeno al bdsm se extrañaría de ver estas imágenes. sin embargo los esclavos nos vemos inmediatamente identificados con el esclavo rapado que está tumbado en el suelo metiendo las botas de su Amo en la boca. por la perspectiva podemos comprobar que el Amo está sentado por encima. la sensación de ver a su esclavo allí tumbado humillado debe resultar muy excitante para el Amo. lo que si conoce el perro son las sensaciones que puede estar sintiendo el esclavo. por una extraña vinculación, el perro empieza a sentir en su boca incluso el sabor de las botas de su Dueño. esto es alimento para el esclavo, para su vida en sumisión.
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