día 1809 de esclavitud, 256 de castidad.

la "deshumanización", también conocida como "objetificación" es el proceso por el que un Amo elimina del esclavo cualquier atisbo de "humanidad", no en el sentido positivo, de sentir o pensar, sino de todo aquello que el tiempo ha añadido: un ente con derechos que tienen voluntad y libertad propias. dentro del espectro de la sumisión es el punto más radical, el extremo más alejado de lo que se supone que es una persona.
en el espectro algunos puntos conservan su "humanidad": un boy sigue siendo humano, y algo más que un esclavo. un boy elige con asesoramiento de su daddy; un esclavo obedece a su Amo, aunque puede no hacerlo; un objeto no tiene la capacidad ya de desobedecer a su Dueño.
no se le escapa a cualquier lector de esta blog que ese es el punto al que desea llegar el perro. hasta ese punto dese el perro someterse. hay muchas formas de conseguirlo: controlando el habla, la toma de decisiones, o manteniendo al perro amordazado durante mucho tiempo, o con la capucha puesta... cualquier cosa que ayude a borrar la identidad del perro.
hoy, además, han pasado dos cosas interesantes. la primera fue que Dueño y perro hablaron por teléfono. el Dueño le dijo al perro que había usado a un esclavo la víspera de navidad. el perro se alegró porque no puede servir al Dueño como le hubiera gustado hacer, así que se alegró porque el Dueño tuviera un esclavo a quien atar y amordazado con sus botas.
en la conversación hubo algo que hizo que el perro se sintiera orgulloso, en el buen sentido del término orgullo. el Dueño que le puso al esclavo las pinzas y que no aguantó ni dos minutos con ellas puestas. no todos están preparados para el dolor, ni siquiera el perro, pero al menos él puede tenerlas puestas durante más tiempo. el perro creyó percibir algo de ese orgullo en la voz del Dueño mientras lo contaba.
el otro hecho ocurrido fue que el perro fue a cenar con unos amigos tras permiso del Dueño. la cena estuvo bien, pero a medida que avanzaba la comida, la conversación se fue derivando hasta que, prácticamente, uno de los comensales admitió que le iba el bdsm y al caña, que lo traten con una actitud dominante. el perro no pudo evitar pensar que en las manos adecuadas sería un fantástico esclavo. es una pena que un esclavo en potencia no se desarrolle por falta de Amo.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo