las sendras no se llevan bien con la lluvia. fueron diseñadas para climas más cálidos o al menos secos, aunque el perro no sabe si es una cuestión de clima o de la mala calidad de las aceras. el hecho es que cuando llueve y las lleva, resbalan. el Dueño lo sabe y entiende que el perro cambie las sendras por otras botas que tiene que no resbalan. no hay color pero al menos el perro no acaba con sus huesos por el suelo.
hoy, sin embargo, y a pesar de que amenazaba lluvia, el perro se ha puesto las sendras. el motivo es que necesitaba estar seguro y confiado porque tenía un día complicado en el trabajo.
la diferencia la nota el perro nada más entrar en el garaje para coger el coche. las sendras hacen un ruido muy especial.son como las harleys de las botas y suenan de forma particular. como un ensalmo mágico el perro empezó a sentirse mejor, más seguro más confiado, más él mismo. así comenzó el día y fue siguiendo ese sentido.
hoy, además de las botas, la jaula se ajustó perfectamente y no molestó, sino que estuvo ahí, siempre presente.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
jueves, 18 de diciembre de 2014
día 1800 de esclavitud, 247 de castidad
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