sabes que has llegado a tu destino porque el cuerpo no te engaña, porque en algún momento vives una escena como esta. tras la humillación más grande, o la sesión más intensa, el Amo pone su mano sobre ti y te sientes el ser más libre, afortunado y feliz de este mundo. esa cara no puede engañar, este esclavo está en su cielo particular, en un lugar más allá del espacio en el que está y del tiempo que está viviendo. está en un momento de plenitud que ha sido provocado y promovido por su Amo. a partir de ahora sólo mostrará gratitud y obediencia, suplicando constantemente que el Amo le vuelva a llevar a ese estado en el que está, y que sólo se puede definir como hogar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario