sábado, 22 de marzo de 2014

minirelato

-Respeto, perro
-¡sí Amo! -contestó él mientras otro azote caía sobre su espalda y las lágrimas empezaron a correr por sus mejillas.
-Tienes que aprender a respetar a los que son superiores a ti.
-¡si, Amo. perdón Amo! - otro golpe cayó sobre su espalda dolorida.
-No volverás a salír de tu celda hasta que yo decida, perro, así que despídete de la luz del sol por unas semanas.
-¡si, Amo. si Amo. perdón Amo! - gritó mientras sorbía las lágrimas de su cara

No hay comentarios: