a veces la esclavitud y la sumisión en la que vive este perro, ponen en evidencias situaciones de la no-vida, que de otra manera pasarían desapercibidas. las dos situaciones que ha podido comparar el perro son la sesión con el cachorro del martes y un encuentro con una "amiga" el miércoles que quedó con el perro para buscar orientación sobre un problema que tiene que afrontar. lo curioso fue las dos formas de afrontar sendas situaciones. mientras el cachorro dejaba a un lado su ego y se sometía, obedecía y se liberaba de las tensión pudiendo, por fin, ser él mismo, la otra persona no hacía sino alimentar su ego y hacer que creciera de forma descomunal hasta casi anularla. en esta dinámica su enfado aumentó y se desarrolló, haciéndola más infeliz. el perro ha comprobado que, con esfuerzo, puede transformar esa energía negativa en positiva, siempre que la otra persona quiera. y este no era el caso.
la conclusión del perro es que el ego es un gran enemigo, el principal enemigo de un sumiso y de un esclavo.si le das oportunidad, se colará y te hará dudar, te hará fracasar y caer, te hará apartarte del camino. si lo alimentas se hará más fuerte, y al final él será quien controle tu vida y hará todo lo posible por echar a tu Amo de ella. y cuando te quedes sólo, tú mismo serás su prisionero, pero estarás en una prisión que no has elegido y que no te dará la felicidad.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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