pocas cosas hay más profundas en la vida de un esclavo y de un Amo que el momento en el que le pone el collar a su propiedad. en ese momento se produce una especie de transformación. el esclavo deja de ser lo que era antes para convertirse en eso, en un esclavo, y en su mente también hay un cambio. la libertad desaparece, la capacidad de decidir disminuye. hasta elegir entre dos sabores o una bebida se convierte en un problema. el cuerpo reacciona encogiéndose y la cabeza adquiere una posición inclinada. el esclavo teme mirar a su Amo y centra su vista en el suelo, o en las botas de su Dueño. una especie de escalofrío le recorre y sólo desea doblar las rodillas para inclinarse y besar los pies de su Señor. todo esto es lo que le pasa a este perro, todo esto ocurre cuando el Amo, sencillamente, cierra el collar alrededor del cuello del esclavo.
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