36 días de castidad, 36 días desde el último ordeño.
trabajo por la mañana y comida con un amigo, tras tener permiso del Amo. si, el perro también tiene vida social, la que el Amo da permiso que tenga. no se trata de no tenerla sino de ponerla bajo la autoridad y el poder y el control del Amo. si El dice que puedo ir, el perro va, si dice que no, el perro no va. es muy sencillo. lo interesante es que el perro fue con botas, por supuesto, y enjaulado, con la polla metida en el dispositivo de castidad, como siempre que sale de casa, y últimamente, también en ella, para evitar tentaciones. hoy el perro tuvo varios amagos dolorosos, al pinzarme un testiculo o al agacharse de una forma rara y provocar un pinzamiento de algún tipo. son los gajes del oficio de esclavo. desde luego el mejor momento del día es cuando tras la ducha y la limpieza, el perro se colocar el dispositivo y cierra el candado. en ese momento es como si todo comenzase. llevar la jaula hace todo el resto del día más llevadero.
después de comer, el perro pasó por decathlon para buscar algo con que cumplir la orden del Amo de ayer: buscar algo con lo que ir amordazado por la calle. el perro pensó en un protector bucal de los deportistas, que te llena la boca y te impide hablar. encontró el perro uno en decathlon por cinco euros y se lo probo, después de comprarlo, claro. con él puedes emitir sonidos, pero apenas puede entendérsete. el perro hizo un video y se lo envió al Amo. por supuesto no es el mecanismo perfecto pero puede servir, así lo creyó el Amo. el mecanismo perfecto sería una funda que mantuviera unidos los dientes superiores e inferiores y que además entrara en la boca manteniendo la lengua sin poder moverla, pero eso habría que hacerlo a medida y costaría muy caro. esto es más barato. y, una vez introducido no podrías hablar en público sin provocar una situación incómoda. por supuesto que te lo puedes quitar, pero igual que cualquier mordaza si no estás atado. es la obediencia y la voluntad del Amo lo que la mantiene en su sitio.
el Dueño quería una jaula como la de la polla para la boca, pero la jaula va debajo del pantalón y se cierra con un candado. conseguir algo así es muy complicado, aunque sí algún lector se le ocurre algún método, el perro estará encantado de escucharlo y ponerlo en práctica.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario