viernes, 26 de abril de 2013

día 1197 de esclavitud


30 días de castidad, 30 días desde el último ordeño
ya un mes desde el último ordeño, 30 días, y el ego parece saberlo porque hoy ha estado especialmente activo. la forma ha sido la tentación, las ganas y los deseos de correrme, de masturbarme desobedeciendo al Amo. por la mañana el perro estuvo en el trabajo enjaulado, y gracias a eso pudo controlarse. por la tarde estaba el agravante de que el perro no iba a ir a la universidad, por lo que estuvo en casa y había una alta posibilidad de que cayera. la solución fue mantener la jaula en su sitio todo el tiempo. el Amo permitía, hasta el martes pasado, que el perro estuviera sin jaula en casa, al menos para descansar, por razones de higiene y seguridad, para evitar algún problema. pero entonces el verdadero problema sería que el perro se ordeñara sin permiso del Amo, o tacándose, sin poder controlarlo, saliera la leche. sería desastroso. así se lo comunicó el perro al Amo y Éste ordenó que llevara la jaula también cuando estuviera en casa.
la cosa se agravó un poco porque siguió ordenando videos y películas que tenía durante parte de la tarde, con lo que la sensación de frustración fue mayor ya que las ganas aumentaron. podría parecer que esto es un retroceso, pero el Amo no ha prohibido al perro sentir determinadas cosas, sino no dejarse llevar por ellas, sobreponerse por obediencia. faltar a una orden sí que sería un retroceso que merecería un castigo."No te he prohibido que te toques", dijo el Amo al perro", "Si lo haces, peor para ti". lo que no puede hacer el perro es correrse, ni masturbarse. este estado es un reflejo de la situación interna del perro. lleva unos días en un estado de elevado nerviosismo y ansiedad, fruto del exceso de trabajo, del agotamiento y de unas fechas complicadas que se aproximan. el Dueño supo de esta situación y llamó al perro. le dijo que era su obligación porque tiene una responsabilidad con su esclavo. ese es el acuerdo, el perro le obedece y vive para dar placer al Amo, y el Amo cuida del bienestar del perro y lo entrena para que se desarrolle plenamente. el Dueño estuvo hablando con el perro, que estaba enjaulado, y sus palabras, además de tranquilizarlo profundamente, provocaron una intensa y dolorosa erección en el perro. el efecto fue el deseado por el Dueño: el perro se calmó, puso las cosa en su sitio y además orientó nuevamente al perro hacia el único objetivo que tiene que tener: una vida en esclavitud, sometido a la voluntad del Amo, todo lo demás es accesorio y provisional. dijo al perro que debería dar las gracias por encontrarse en esa situación, algo que el perro hace cada momento. no se puede desear mejor Amo. las posibilidades que de nos encontráramos eran remotas, pero ocurrió, lo cual no puede dejar de indicar cierta predestinación. en la conversación el Dueño confirmó varias cosas: que nunca más será el perro libre, que cuando de el gran salto llevará una jaula de metal permanentemente y que la que llevo actualmente no se la quitará hasta que sea sustituida por esa. el perro debe aceptar que ya no controla su sexo, que ya no le pertenece. reafirmó también que, por su parte, no hay marcha atrás, que moriré bajo sus botas, perteneciéndole.
el perro es consciente, muy consciente, de que estas palabras, en otros contextos, provocarían mucho nerviosismo y temor, mucha ansiedad. sin embargo en el perro tuvieron el efecto contrario, le produjeron calma y tranquilidad. posiblemente se ala muestra más evidente de que el perro es una propiedad más del Dueño.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.

No hay comentarios: