día 1182 de esclavitud

15 días de castidad, 15 días desde el último ordeño

el perro entiende cada vez más al Dueño cuando le dice que le amordazará y que pasará gran parte del tiempo en silencio tras el Gran Salto. cuando uno habla y habla, y habla, acaba vaciándose. eso es lo que le ha pasado al perro durante esta semana. demasiados encuentros, demasiado trabajo, demasiada interacción que desemboca en una pérdida del horizonte, del sentido, de lo que eres. un esclavo no es excesivamente un ser social, este no al menos. el ego aprovecha estas circunstancias para hacerse fuerte, para empoderarse y hacerte perder parte del trabajo realizado. por eso hay que estar atento y por eso el Dueño ya le ha dicho al esclavo que este fin de semana será de encierro y de interiorización, de volver a conectar con la sumisión y la obediencia de un esclavo. 

toda esta actividad también se ha reflejado negativamente en el blog, por ejemplo, que no ha podido poner aún al día el perro. con casi tres semanas de retraso, eso se ha convertido en un problema serio que debe solucionar rápidamente. es preferible un poco de trabajo todos los días, que un atracón en un momento dado, eso es evidente. sin embargo no siempre puede el perro hacerlo. a veces llega a casa después de 13 o 14 horas más tarde de haber salido, y en esos momentos no tiene ni la fuerza ni la capacidad de ponerse a escribir algo mínimamente coherente. la cuestión es que el perro es esclavo de su Dueño, no de otro Amo ni de otra actividad. evitar vivir esclavizado por el blog puede ser un punto de partida. es un vehículo para compartir con el mundo un tipo de vida y de relación diferente. no busca el perro aprobación, sino hacer ver a los que tengan los mismos sentimientos, que no están locos, ni sienten algo equivocado, y eso se puede hacer con calma.

el esclavo, nuevamente, hace firme propósito de enmienda e intentará regularizar el blog para ir publicando poco a poco cada día.

obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.