los esclavos dependemos de los Amos, les pertenecemos y cuando nos toman como una propiedad suya, existimos para darles placer. poco importa lo que nosotros quedamos, aunque los buenos Amos nunca llevarán a su esclavo más allá de donde pueda ir en cada momento. sin embargo no todos los Amos son buenos y abusan de sus posesiones. por eso es tan importante ser cuidado a quien te sometes.
en la imagen de hoy asistimos a ese hecho. el esclavo atado y despersonalizado con una capucha, está en la mazmorra dando placer a su Amo, sufriendo dolor. esa es otra contradicción del bdsm, dar placer sintiendo dolor. el perro que escribe se ha encontrado en esa situación y la reacción ha sido siempre la misma: repetirse su mantra mental que dice: "para esto estoy aquí, para eso he venido, para eso existo, para servir a mi Dueño". el poder de la mente es increíble porque con esta frase repetida, una y otra vez, el dolor se hace menos dolor. se vuelve sumisión.
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