esta semana parece no tener fin. está siendo una semana dura en relación a la no-vida. hoy tenía la tarde liada, muy liada, pero no podía cumplir con las citas porque estaba enfermando, así que nada más salir del trabajo supliqué permiso al Dueño para quedarme en casa encerrado, y lo concedió. realmente lo necesitaba. el perro estuvo toda la tarde encerrado, y fue muy agradable, prácticamente sin hablar con nadie. en días como hoy sólo esos momentos hacen más llevaderos la no-vida. por eso tal vez la perspectiva de terminar encerrado no es tan desagradable, sino al contrario, bastante atractiva.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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