al perro le cuesta admitir que sólo lleva un día de castidad y que la última vez sólo pudo estar 3. cada día en castidad es un día más de control, de sumisión, pero sobre todo de obediencia. cada día de ordeño, es una especie de pequeño "fracaso". es necesario para la salud, posiblemente, pero sólo debe ocurrir cuando el Dueño lo considere oportuno, no cuando el perro lo desee. hoy le perro ha estado pensando en eso. y el Amo ha estado más pendiente de él, más encima de él. las cosas que ha hecho son realmente pocas: trabajar toda la mañana y estudiar toda la tarde. lo primero sirve para alimentar el cuerpo, lo segundo para alimentar el alma y el espíritu. por la mañana todo han sido gritos, carreras, órdenes; por la tarde todo ha sido silencio y soledad, únicamente alterada por los libros. lo primero ha sido no vida, lo segundo lo más próximo a la vida que este perro puede disfrutar lejos del Amo. sin embargo esto no duró mucho porque al final apareció gente y el perro tuvo que socializar. al final la mazmorra se sigue presentando como el lugar ideal donde mantener la vida real de esclavo.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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