a veces la no-vida es como una ola que te arrastra y que casi no te permite respirar. aquí en canarias sabemos algo de eso, de olas, de mar y de la posibilidad de ahogarte. desde pequeños nos enseñan a tener respeto por el océano y a tener cuidado con las mareas. a veces este esclavo se siente así, como en medio de una fuerte marejada que te lleva justo hacia el lugar donde no quieres ir, alejándote de la orilla segura. que nadie se confunda, esa orilla no es otra que la esclavitud bajo control permanente del Dueño. cuando las decisiones, el trabajo, las ocupaciones diarias te descentran y te alejan de lo realmente importante, este perro se siente a veces como ahogándose. hoy ha sido uno de esos días, menos mal que el Amo ha estado ahí, como siempre, y ha podido encauzar a este perro.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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