hay una frase que adquiere un sentido completamente diferente en el mundo bdsm, por lo menos desde la perspectiva del esclavo: "cuanto más, mejor". se puede formular de distinta forma pero más o menos viene a indicar que cuanto más obediencia, mejor; cuanto más sumisión, mejor; cuanto más fuertes las ataduras, mejor; cuando más corta la correa, mejos; cuanto más control, mejor. es la idea que señalaba este perro ayer. los esclavos buscamos, aspiramos y deseamos esto, más control de nuestros Amos, más obediencia, más sumisión. para eso nacemos y eso es lo que buscamos. incluso cuando a veces nos resistimos, realmente no somos nosotros, sino nuestros egos quienes hablan, porque en el interior de todo esclavo lo que anhela desesperadamente es someterse.
a la frase también puede darse la vuelta: cuanto menos decisiones, mejor; cuanto menor libertad, mejor; cuanto menos voluntad, mejor. no vivimos precisamente en un mundo donde menos es más, pero en el bdsm esa regla funciona, al menos con los esclavos: cuanto menos tienes, más eres; cuanto menos posees, más eres tú mismo; cuanto menos tienes que decidir, más dispuesto estás a obedecer. es invertir el orden establecido. por eso no somos comprendidos y por eso, en el fondo, somos una amenaza para los bienpensantes que no comprenden la verdadera naturaleza de la sumisión.
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