Amo ha ordenado ordeñarme esta mañana, y este perro ha obedecido. como las últimas veces, fue rápido y nada placentero. se ha convertido en una función puramente física, como comer o dormir, sin una mayor significación. no hubo súplica por parte de este perro, ni ninguna indicación. fue por propia iniciativa de su Amo, de hecho este perro no tenía especiales ganas de ordeñarse. el resto del día estuve en casa todo el día encerrado. otro día completamente aislado.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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