los esclavos que llegan a un grado más elevado de desarrollo, lo que se traduce en que bajan hasta lo más profundo de su ser, ya no son esclavos, ni perros; sino que se convierten en objetos, en propiedades. como tales puede y deben ser tratados y transportados, objetos valiosos, pero objetos al fin y al cabo. podríamos sacar conclusiones variadas de esta imagen, pero el collar nos da una sola posible: un esclavo que se ha convertido en un objeto. sin poseer nada, es poseído, sin poder manejarse por sí sólo, es transportado. pocos llegamos a este grado de deshumanización y de realización personal. pocos tienen esa suerte, y pocos soportan el recorrido. por eso, cuando uno lo consigue, sólo despierta un sentimiento: admiración
1 comentario:
es difícil eliminar la mente. se debe hacer una vida normal hasta que se está bajo el alcance directo del amo. pero cuando está el amo, la mente no es necesaria. mi amo funde mis conexiones mentales con su mera presencia. mi cuerpo responde a su respiración. reacciono a sus movimientos. no me hace falta la mente en su presencia. su voluntad es la que yo reflejo. mi amo cuida de mí, quiere que sea lo mejor, que esté lo mejor posible, pero en su presencia soy una mera cosa que usa a su gusto y placer.
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