la vida no la puede ver igual un Amo que un esclavo. su perspectivas son diferentes y por tanto el mundo que ven es distinto, incluso admitiendo la posibilidad de coincidir en algunos aspectos. por supuesto este perro ve la vida como la ve un esclavo, pero de vez en cuando intenta comprende cómo la ve su Amo, se pone en su lugar e imagina un mundo desde esa perspectiva. no es más que un ejercicio de imaginación porque está naturalmente imposibilitado de verlo así. cuando en raros momentos lo consigue, ver el mundo como lo vería su Amo, el sentimiento que le surge a este perro es de admiración, veneración, reconocimiento, adoración.... porque toma conciencia de lo difícil y de la carga que significa ser Amo. a la vez se llena de un profundo sentimiento de agradecimiento porque también toma conciencia de lo afortunado que es al haber sido elegido por un AMO que lo trata de esa forma y lo cuida y lo adiestra para que sea mejor de lo que es.
No hay comentarios:
Publicar un comentario