viernes, 3 de febrero de 2012

749 días de esclavitud, 9 de castidad

esta tarde he vuelto a tener tentaciones. tenía una tarde muy tranquila para como suelo tenerlas y eso hizo salir mi lado más perro y me entraron ganas de masturbarme. eso estaba descartado, así que sólo quedaba una salida, suplica a mi Dueño que me permitiera ordeñarme, pero entonces caería en lo mismo, anteponer mi placer al servicio, al sometimiento y a la entrega. estuve luchando contra esa tentación prácticamente toda la tarde. fue muy duro porque mi mente de esclavo parecía concentrado exclusivamente en eso.
por la noche mi Dueño pareció leer mi mente, porque en una conversación me dijo que debía eliminar la palabra "deseo" y todos sus derivados de mi vocabulario. este perro ya no tiene derecho a tener "deseos", sólo puede emplearlo en referencia a mi Amo. nuevamente una vuelta de tuerca más, un nuevo límite que impide a este perro ir en una dirección y le obliga a ir en otra muy concreta, la que mi AMO desea que lleve. por supuesto la obediencia se impone y este perro obedecerá gustoso, aunque le costará un poco entrar en esta nueva dinámica. una cosa es segura, sin deseos el ego tiene aún menos campo de acción. está perdiendo esta guerra.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

si LOS DESEOS, son la guerra diaria, no solo para los sumisos, en la vidad diaria los deseos hacen a la gente infeliz, frustrante... que una amo anule esa palabra debe ser una liberacion para el sumiso esclavo, adelante y animos ...