martes, 3 de enero de 2012

cartas desde la mazmorra 30

jack rinella es uno de los autores que más me gustan y más respeto. casi desde los primeros días de  mi viaje por el bdsm encontré su página web (pincha aquí para visitarla) y recibía sus columnas por correo electrónico. debo mucho a su forma de pensar, porque me sentía, y me siento, plenamente identificado con lo que allí se dice. no creo que haya un paralelismo, pero sí cierta confluencia de intereses entre sus vida y la de este perro en el sentido de que buscamos cosas similares desde perspectivas diferentes. su última búsqueda es la de poseer un "objeto", algo sobre lo que escribió un pequeño ensayo que publicaré en este blog una vez traducido (pincha aquí para verlo). igualmente tiene un blog donde publicó hace poco una entrada titulada "preparado". como todas las suyas fue una entrada intensa, y hasta sabia podría decir. en ella hablaba de cómo después de mucho tiempo trabajando y conversando con un aspirante a "objeto", éste le había dicho que no estaba preparado.
todo esto me recordó algo que me dijo mi Dueño en mi último viaje, que ojalá nos hubiéramos encontrado unos años antes. es un deseo que comparto pero que entiendo que es inútil porque si nos hubiéramos encontrado unos años antes posiblemente yo no sería su perro, ni El sería mi AMO. hace unos años no estaba ni remotamente preparado para escribir la mitad de las cosas que contiene este blog, ni las hubiera creído. posiblemente hace unos años, si alguien me hubiera propuesto el proyecto que me ha ofrecido mi Dueño, habría salido huyendo despavorido. cada esclavo, cada Amo incluso, tiene su proceso y su tiempo. aunque parezca providencialista, las cosas ocurren cuando tienen que ocurrir, cuando están maduras y se produce la combinación de elementos necesarios para que ocurran.
la virtud de todo esto consiste en saber esperar, en saber tener paciencia y, sobre todo, en prepararse para que cuando sea el momento adecuado, las cosas ocurran. este perro no se habría llamado perro si antes no hubiera sido un sumiso, que alimentó su sumisión con lecturas, escrituras, y experiencias que ahora entiendo arriesgadas, pero que sin ellas no habría llegado a donde estoy. el camino hacia la esclavitud está empedrado de frustraciones, de Amos en los que puse ilusión, de pequeñas intuiciones que me decían "no es por aquí", y de grandes decepciones porque cuando pensaba que estaba preparado, los Amos no lo estaba. han habido encuentros y desencuentros, malas interpretaciones y frustraciones, muchos días de soledad, algunos intentos de abandonar el camino y, por fin, el darme cuenta de que tenía que ir por aquí, costase lo que costase.
uno no puede luchar contra su naturaleza. esta es una lección que aprendí tarde y que me costó aprender, pero ahora se ha convertido en una de las bases más estables de mi existencia como esclavo. es inútil preguntarse qué hubiera pasado si.... las cosas son como son y no pueden cambiarse, pero sí que puedes prepararte para llegar a donde quieres llegar. este perro siente angustia de que haya otros sumisos de nacimiento, aquellos que sólo se realizarán bajo las órdenes de un Amo, que buscan un Dueño y que puede que no se lleguen a ser nunca felices porque creen que esto es una fantasía irrealizable. no lo es, al menos no para este perro. pensando en ellos publico este blog y escribo en él con permiso y apoyo de mi Dueño. ojalá hubiera encontrado hace siete años un blog como este, tal vez habría acortado camino.... pero vuelvo a caer en la misma trampa. no se puede acortar camino, todos y cada uno debemos recorrer el nuestro. este perro tiene una hoja de ruta, un plan que le ha trazado su Dueño. será duro pero ahora se trata de ser fiel a él y no salirse del camino. si tú tienes el tuyo, sólo puede decirte que puedes contar conmigo.
feliz semana.

1 comentario:

Anónimo dijo...

maravilloso texto; me siento tan identificado en todo, eres un maestro para los nuevos esclavos, sigue asi....