mi Dueño se ha sentido orgulloso de su perro, de su esclavo hoy. me ho la hecho saber. la razón fue que me ordenó hacer una cosa y pude hacerla rápidamente. siempre me sorprende el poder de sus palabras. bastaron unas pocas para que este perro sintiera como llegaba a las cotas más altas de placer y satisfacción. no hubo sexo salvaje, ni sesión intensa, sencillamente fueron unas palabras.... y la satisfacción del deber cumplido. mi Dueño tenía un deseo, que emitió en forma de orden. desde ese momento este esclavo existió exclusivamente para hacer realidad ese deseo, para obedecer esa orden. deseo y orden se superponen en la mente del esclavo de forma que lo único importante es la voluntad del Amo. fue algo muy concreto que duró muy poco tiempo, pero que nos sirvió a los dos, Amo y esclavo, para dsifrutar de un día que hubiera sino anodino sin este hecho.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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