lunes, 2 de enero de 2012

717 días de esclavitud, 3 de castidad

el nuevo año ha comenzado con calma, con algunas ocupaciones propias de estas fechas. los esclavos también regalamos cosas en reyes, y poco más. aún saboreo la última visita a mi Dueño e intento poner todo lo ocurrido en orden. es como darme un subidón de algo que luego tengo que ajustar y ordenar, poner bien en su sitio y digerirlo. ahora esta perro está en esa etapa. lo que más me impresionó fue el hecho de que parecía que no me había ido. habían pasado más de 100 días desde la última vez que estuve sirviéndole y resulta que es como si nos hubiéramos visto ayer. teléfono e internet ayudan pero sin duda lo que está debajo es la certeza de que estoy en el lugar y en la posición en la que siempre quise estar, en la que siempre desee estar y en la que espero estar, ya de manera permanente, muy pronto.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo

1 comentario:

Anónimo dijo...

Deseo que esa dura vida de obediencia permanente sea para tí una realidad cuanto antes si realmente satisface tu principal necesidad, la de servir.