sirviendo a mi Dueño 1

me tuve que levantar temprano para ir al aeropuerto porque el avión salía a las siete de la mañana. no costó mucho, ante la perspectiva de poder estar a media mañana delante de mi AMO. todo fue bien y como había salido temprano de las palmas, me senté a desayunar allí mismo.
de allí fui al centro, hasta chueca donde entré a echarle un vistazo a algunos libros en berkana y en a different life. buscaba uno en concreto que no encontré.
al salir, ya cerca de las dos, me encontré con mi AMO. tenía puestas unas botas sendra azules y negras y una chupa de cuero. fuimos a SR, la tienda leather de chueca. para un fetichista es lo más cercano que está el cielo de la tierra, a falta de visitar tiendas similares en berlin, londres o san francisco. la idea original era encargar una nueva capucha, que tenía que ser hecha a medida, pero nos encontramos que, debido al 12 aniversario de la tienes, las prendas de cuero estaban rebajadas. mi Dueño empezó a mirar mientras me tomaban las medidas. medio instigado por El, me planteé comprar un pantalón de cuero, enormemente rebajados. como este perro es grande de constitución, ancho y alto, no había tallas para mi, ni de pantalones ni de chaps. sin embargo estaba la posibilidad de hacerlos a medida, así que, por consejo de mi AMO, encargué unos chaps. justo cuando me estaba tomando las medidas, mi AMO se acercó a las mordazas y cogió una en forma de pene. me dijo que me la regalaría. era de latex y consistía en un pene pequeño, pero suficiente para amordazarte. por delante era liso y se cierra detrás con una tira ancha.
hacía frío, mucho frío, 0 grados en barajas cuando llegué, así que tenía un pañuelo al cuello, de lo que usan los moteros que se pueden paoner para taparse parte de la cara. justo estaba pagando cuando llamaron a mi AMO por teléfono y salió. aproveché la ocasión y pagué. como había dos cosas encargadas, la capucha y los chaps, mi AMO queró en que El los recogería cuando estuvieran, así que dio su móvil como forma de contacto.
-¿Te envuelvo la mordaza?- me dijo el dependiente.
-no, me la llevo puesta- contesté yo y, ni corto ni perezoso, me metí la mordaza en la boca, la cerré, cogí la mochila y salí, poniéndome el pañuelo para tapar la mordaza.
como justo era la hora de cerrar, el dueño de SR salió detrás mia y empezó a cerrar la tiena. mi AMO, soprendido, preguntó.
-Pero, ¿has pagado la mordaza?, ¿la ha pagado él?- preguntó al dueño de SR, señalándome, todo esto ya en la calle. entonces me bajé ligeramente el pañuelo y le mostré la mordaza.
la cara de sorpresa de mi Dueño no tenía precio, incluso se lo comentó a la persona con la que hablaba que sabe que tiene un esclavo. estaba casi en estado de shock.
nos despedimos como pudimos, bueno, se despidió mi AMO porque yo no podía hablar, del dueño de la tienda, y empezamos a caminar por la calle pelayo. la sorpresa de mi AMO y su búsqueda de alguna señal que mostrara que llevaba la mordaza se me ha quedado grabada en la mente. estaba realmente impresionado. me miró varias veces para comprobar que no se notaba debajo del panuelo y que realmente la tenía puesta.
ya era hora de comer, y mi AMO tenía hambre, así que entramos en un restaurante en la misma calle pelayo. aún llevaba la mordaza, así que rápidamente,y bajo las órdenes de mi AMO, me fuí al baño a quitármela. un grupo de comensales se quedaron mirando, pero seguí adelante. me parecía estar viviendo uno de mis relatos. de hecho recuerdo un reciente mini-relato similar a esto. sin embargo esto era real, muy real.
comimos los dos hablando de muchos temas. la comida estaba bien. cada vez que este perro ha ido a madrid a servir a mi Dueño hemos comido allí. es una especie de tradición, una entre otras.
cuando terminamos salimos y me volví a poner el pañuelo y mi AMO me pidió la mordaza que había metido en la mochila. sabía que iba a ir hasta su casa amordazado... por la calle.
justo en una esquina frente a la tienda de libros y disco que hay allí, me metió la mordaza en la boca, la ató a mi cuello y me subió el pañuelo, tapándolo. empezamos a caminar hacia su casa y los dos tenímos miedo de que alguien se diera cuenta ¿lo teníamos realmente o sólo era una proyección mia? El parecía encantado.
nos cruzamos con muchas personas, y nadie nos miró. en el camino sacó algunas fotos y algún video. varias veces intenté hablar, casi sin darme cuenta de que tenía la mordaza puest. el único inconveniente era que babeama más de la cuenta. El me hablaba y yo no podía responder a nada. me sentía indefenso por la calle. era extraño tener las manos libres pero no poder hablar en absoluto.
-Algunos días salimos y salvo que tengamos que pedirle algo a un dependiente o a alguien, podemos volver a casa y hacer lasc osas que debemos hacer sin hablar con nadie - dijo mi AMO en un momento dado. más que una afirmación creo que fue un pensamiento de lo que podría hacer conmigo en el futuro, cuando diera el Gran Salto.
intenté responder pero no pude. seguimos andando y cruzando por alonso martínez, nos encontramos con un tio espectacular. casi dos metros , barba, chupa de cuero marrrón, vaqueros y unas impresionantes y enormes sendra negras repujadas. intenté decírselo a mi AMO pero sólo pude hacer un movimiento con los ojos. aún así EL lo vio al instante y se quedó tan encantado como este perro.
poco después llegamos a su casa. nada más entrar me hizo arrodillarme y tras sacar algunas fotos más, sacó la mordaza de mi boca lentamente. la volvió a meter otra vez profundamente y la volvió a sacar. entonces me llevó a su habitación y empezó todo.