jueves, 27 de octubre de 2011

650 días de esclavitud, 9 de castidad

de nuevo este perro se ha retrasado en la elaboración de las entradas de este diario, con lo que he retrasado a mi Dueño a la hora de aprobarlas, pero han sido unos días muy movidos en cuanto a mi no-vida. los problemas se han acumulado, hasta el punto de crear una especie de presa que evita que fluya tranquilamente mi naturaleza de esclavo. jornadas de diez horas, problema tras problema, decisión tras decisión, todo se parece sobreponer hasta casi conseguir que pierda el norte, el objetivo vital de la existencia de este perro. gracias a mi AMO esto no ha ocurrido. su dirección, su orientación, no es sencillamente para cosas o temas "morbosos", sino que está ahí para cosas "cotidianas" y aparentemente intrascendentes. a veces siente este perro pudor de suplicar permiso para determinadas cosas, pero así tiene que ser. El debe estar informado de todo, debe saberlo todo sobre este perro, para así controlarlo todo. así como la naturaleza de este perro es someterse, la de mi AMO es dominar; mientras este perro se siente feliz obedeciendo, mi AMO se realiza mandando, ordenando. es la simbiosis perfecta y a este perro no debe avergonzarle suplicarle permiso a su Dueño para cualquier cosa, porque de esa manera hace feliz a su Señor.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo

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