una foto increíble, no sólo por estar sacada en un encuentro real, creo que el folsom de berlin, sino por la composición, la luz y el brillo de todo el cuero que sale en ella. aunque está tomada en una calle parece sacada de una película donde todos los elemenos estén perfectamente organizados y dispuestos para el mayor disfrute del espectador. parece casi como si puedieras oler el cuero del pantalón del Amo o la capucha del perro que sigue a su Señor y parece olisquearle el trasero, como hacen los perros para reconocerse y establecer su jerarquía. le invito a fijarse no sólo en el motivo central, sino alrededor: los espectadores de la escena mirando con sus botas y sus chupas de cuero, como un ser inferior se somete a uno superior. la envidia es definitivamente un sentimiento muy malo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario