ha sido un día excitante en el trabajo. salí tarde pero feliz porque este esclavo evitó un abuso de poder en su no-vida. aquello que hubiera sido un momento memorable en mi vida, se transforma en un momento para el olvido en mi no-vida. la única diferencia es la intención de mi Dueño. El siempre busca el bien y lo mejor para su esclavo, para su perro, incluso cuando este perro no se de cuenta y le parezca algo inconcebible. sin embargo llega un momento en el que todo cobra sentido y se entiende, lo entiende. sin embargo hoy el hecho fue otro, la persona que pretendía realizar el abuso pensaba única y exclusivamente en sí mismo, en salir beneficiado.... realmente en quedarse con todos los beneficios. este esclavo, cumpliendo un mandato de su AMO, le hizo frente y, educadamente, le desmontó el chiringuito, evitando una injusticia. los esclavos hemos perdido el poder en la relación D/s, pero flaco servicio le hacemos a nuestros Amos si nos comportamos con todo el mundo como con ellos. mi Dueño me ha dado un mandato claro: "sólo te piso Yo y aquel a quien yo le de permiso": eso significa que no debo dejarme pisar por nadie más, que debo mirar a todos de frente y evitar que cometan injusticias. ser esclavo no significa decir si a todo, u obedecer al primero que se intenta arrogar el papel de jefe sin serlo. hoy le he parado los pies a un compañero, siendo fuerte, honrado, sincero y además con la certeza de que tenía la razón y la justicia de mi parte. y con eso he sido obediente y sumiso a los deseos de mi AMO. es una nueva contradicción que adquiere pleno sentido para este esclavo, el sentido de una vida de sumisión.
con respecto a la castidad sigo casi sin notarlo. no sé si será porque mi cuerpo está adiestrado o sencillamente que estoy pasando por una etapa de apatía en cuanto al deseo, o que éste está controlado y empieza a estar domesticado. el hecho es que no me estoy dando ni cuenta de eso estos días. supongo que la actividad en la que estoy metido ayuda a que sea así, y además que no me pongo en situaciones de tentación: no miro más que las fotos imprescindibles y no veo ninguna película para evitar tener que dedicar más energías de las necesarias a ser obediente. es verdad que de vez en cuando, cuando voy al baño, una sensación extraña me dice que estoy sometido a castidad, pero no es muy significativa.
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